miércoles, 28 de octubre de 2009

una eternidad perdida en tus ojos, capítulo 38: "jake, ¿quién diablos es?



nota de autora: los iento mucho, es que estuve enfermita, el lunes dormí 17 horas seguidas como tronco!, estaba como inconsciente y desperté con fiebre, debió de ser un resfriado, aún estoy mareada y me duele la cabeza, pero no las defraude :D, aquí les dejo capi, me encantan los celos de Edward!!, a y pasen por el último capítulo dem mi otra novela, "complicated" (www.fotolog.com/twiliight_fics) ame la imgen ^^


-Bella, hablé con la directora para hacer unos nuevos diseños para el equipo de porristas, el otro es muy soso, pero el que diseñé, dios mío es hermoso- chilló Alice eufórica, ayer no paraba de gritar por toda la casa ya que hoy empezaban los entrenamientos de porristas…y de básquetbol, pero por lo menos no sería tan aburrido con el don de Bella.
-me alegra de que estés tan entusiasmada Ali, pero ya tenemos que entrara a clases o sino llegaremos con retraso- dijo Bella, Alice asintió con la cabeza distraídamente mientras observaba unos bocetos en su cuaderno, Alice nunca cambiaría.
-adiós chicos- se despidió Tanya.
-vamos Edward, tenemos que ir a trigonometría- me dijo Bella jalando de mi brazo.
-¿estás emocionada por trigonometría?-le pregunté incrédulo.
-ayer entendí la mayoría de los ejercicios, quiero sacar puros dieces y contigo como tutor lo conseguiré fácilmente- caminó dando saltitos al lado mío, se parecía tanto a Alice.
-¿cómo va todo con tu casa, Bells?- le pregunté con una sonrisa torcida mientras nos sentábamos en nuestra mesa.
-increíble, los invitaré a verla hoy, es grandiosa, tiene un toque de ying & yang, es algo muy rústico, está en medio del bosque, es gigante, la verdad es que me siento un poco sola, estaba acostumbrada a estar en un castillo lleno de gente, pero ya me acostumbraré.
-entonces, ¿después de las prácticas a tu casa?
-claro, eso me recuerda, les voy a quitar sus poderes vampíricos ahora mismo para que se acostumbren a vivir sin ellos- se concentró unos momentos haciendo que una pequeña arruga se creara entre sus cejas, se veía muy tierna así, de la nada se extendió una sonrisa en sus labios y soltó una carcajada.
-¿qué es tan gracioso?- le pregunté.
-no me canso de hacer que Emmet se golpeé la cara- dijo aún con los ojos cerrados, yo me uní a sus risas, ojala tuviera ese poder para vengarme de Emmet.
-chicos, atentos a la clase, hoy veremos como transformar los números con raíz cuadrada…- el profesor comenzó a hablar pero yo no le hice caso, sabía sus clases de memoria, además sabía todo lo que podía existir acerca de las matemáticas, por eso me dediqué a observar a este bello ángel poner atención en clases, habían veces en las que se le formaba una arruga en medio de la frente por su concentración, pero solo la hacía verse más adorable, cuando terminó la clase Bella se dio cuenta de que la miraba, me devolvió la mirada y me perdí en esos orbes chocolate, y para variar Bella me torturaba con sus pensamientos, ‘¿por qué Edward me mirará así?, ¿no sabe que amo sus ojos, que me pierdo en ellos?, bueno, ahora lo sabe porque está escuchando todo en mi mente, ¡aplausos para Bella!’, no pude reprimir una sonrisa, me encantaba la mente de Bella.
-basta de meterse en mi mente Cullen, tenemos que ir a la siguiente clase- Bella se paró, me sonrió y se fue, genial, cuatro horas sin saber de ella.
La verdad es que fueron cuatro horas de espionaje, me sentía como un vampiro psicópata al ver a Bella en la mente de los demás o al meterme en su propia mente, era tan interesante, sus críticas a los profesores, los comentarios por los chicos que la miraban, obviamente eran comentarios como “¿se te perdió algo entre mis piernas?” o “¿quieres que te de una mejor vista de mi escote?, ¡cierra la boca baboso!”, sus pensamientos me hacían sonreír constantemente, era imposible aburrirse con una mujer así, aunque debo decir que hoy yo también me quedé mirando detenidamente su cuerpo, se veía increíble con unos pantalones pitillo, una polera roja que decía “i like my boy!”, una chaqueta de cuero que no sé como, pero le resaltaba increíblemente sus curvas, unas converse negras, el pelo suelto, algo desordenado, se veía tan exquisitamente rebelde... En fin, tocó el timbre del almuerzo y me fui rápidamente hacia la cafetería, tenía mucha hambre, sentía el olor a la comida humana y por primera vez no me dio asco. Entré y me encontré con mis hermanos sentados y Bella haciendo la fila, me saludó con la mano y me indicó que fuera hasta allá, me coló detrás de ella y me preguntó dulcemente “¿tienes hambre?”
-mucha- contesté con un suspiro, ella se rió de mi impaciencia.
-calma, ahora descubriremos cual es tu comida favorita, creo que para ti sería la pizza, ya no sabrá a tierra, ajjaja- me uní a su musical risa, compramos el almuerzo, yo pedí una pizza con una coca-cola y ella una ensalada surtida con un agua mineral y una manzana.
-si que te cuidas- dije indicando su almuerzo mientras caminábamos hasta la mesa de mis hermanos.
-obvio, recuerda que soy semivampiro y mi cuerpo puede cambiar si no me cuido puedo terminar como una ballena- dijo con una mueca de disgusto en su cara, yo me reó de ella mientras nos sentábamos.
-chicos, una clase más y luego viene el entrenamiento- dijo Alice dándole una mascada a un sándwich dietético, ‘qué les pasaba a las mujeres que no disfrutaban de lo increíble de la comida chatarra?’, pensó Emmet, yo me reí de su comentario, miré su bandeja, se rebalsaba, tenía una hamburguesa gigante, dos hot-dog, una pizza mediana, papas fritas, una bebida gigante, wooah!
-Emmet, recuerda que en este estado puedes engordar- dijo Bella en tono de advertencia.
-Bella, con todo el ejercicio que haré hoy no se podrá, ¡por fin usaré mis pesas y aumentarán mis músculos!- dijo contento, todos nos reímos de él.
-¡que rico sándwich!- dijo Rose soltando un gemido por el sabor de su comida, nos volvimos a reír.
-si que lo disfrutan- dijo Bella con una sonrisa burlona en su cara.
-obvio, ¡hace cien años que no probaba un pastel de chocolate y ahora me deleito con su rico sabor!- Alice gimió al igual que Rosalie al probar su postre, pastel de chocolate, era un bizcocho de chocolate, relleno de chocolate derretido, decorado con crema de chocolate y trozos de chocolate negro y blanco, se veía bastante rico.
-¿me das un poco?- le pregunté.
-consíguete tu postre Edward Anthony Cullen Masen- Alice casi me gritó defendiendo su pastel, esto era demasiado, no pude evitar reírme a carcajadas- calma pequeño, mami está aquí, solo yo te comeré- susurró Alice hablándole al pastel haciendo que nosotros nos riéramos más fuerte, ¡estaba loca!
-Alice, creo que no deberás consumir más azúcar- le dijo Jasper sonriente, justo en ese momento tocaron el timbre de inicio de clases, suspiré, antes se hacía tan larga la hora de almuerzo, peor ahora que comimos se me hizo demasiado corta.
-vamos a biología Edward, esta materia si que me encanta- dijo Bella saltando de su asiento eufórica, no sabía de donde sacaba tanta energía.
-adiós chicos- nos despedimos y nos fuimos a clase, la cual pasó igual que ayer, Bella y yo amábamos la biología, ninguno tuvo problema, la verdad es que fue divertido.
-ahh, vamos al entrenamiento- chilló Bella cuando sonó el timbre para el recreo, cinco minutos y entraría a esa estupidez en la que me metí.
-vamos- dije sin ánimos.
-oh, vamos Edward, ¡no te preocupes!, estaremos juntos, será divertido- dijo Bella tomando mi mano cuando salíamos de clases.
-claro, creo que esa es la única razón por la que entré a esta apuesta- dije abrazándola por la cintura mientras ella sonreía abiertamente por mi tacto, lo único que hizo fue apretarse más a mi costado mientras caminábamos.
-vaya, vaya, miren quienes vienen tan juntitos- nos molestó Emmet.
-cállate Emmet, o sino te devuelvo tus dotes vampíricos- le amenazó Bella, Emmet levantó las manos como si Bella lo apuntara con una pistola, no pude evitar reír.
-vamos a cambiarnos Edward, deja que Bella vaya a los vestidores- ‘a menos que quieras ayudarla, claro’, pensó Emmet con una sonrisa burlona, me alejé de Bella y le di un golpe a Emmet en la cabeza del cual Bella se rió, nos cambiamos en los camerinos de hombres rápidamente, cuando volvimos las chicas ya estaban ahí, su equipo de porristas era, como decirlo, algo atrevido, era un top con unos tirantes delgados, como si fuera una polera de tirantes, pero apretada y acababa antes del ombligo, abajo las tapaba una mini falda, que tenía más mini que de falda, pero por lo menos llevaban pantaletas blancas abajo que les tapaba justo lo necesario.
-¿les gustan los nuevos uniformes?, los otros parecían de monjas- dijo Alice dando saltitos hasta nosotros.
-son lindos- dijimos los tres al unísono mirando como estúpidos babosos a las tres chicas que teníamos en frente.
-Isabella Marie Volturi, ¿eres tú la misma niñita consentida de papi?- dijo una voz ronca atrás de nosotros, nos dimos vuelta y vimos a Jacob Black, era un licántropo, manteníamos una relación “cordial”, sin problemas, pero todo los problemas se crearon en mi cabeza cuando Bella saltó encima de él y lo abrazó enredando sus piernas en la cintura de ese chucho con un grito de alegría.
-Jake, Jake, Jake, dios mío, ¿cómo has estado?, ¿por qué no me mandaste si quiera una estúpida carta maldito lobo consentido?- le preguntó dándole un golpe en la cabeza.
-¿cómo querías que te enviara una carta si tu padre casi me arranca la cabeza cuando me vio?- le preguntó dando carcajadas.
-ay, ¡no puedo creerlo!, ¡cuéntame cómoColor del texto has estado estos últimos años!- ¿años?, esto ya me estaba superando, ¿desde cuándo se conocían?, ¿por qué Bella tenía sus piernas enroscadas en su cintura?, ¿por qué no me saluda a mi tan eufórica?, bueno aunque a mi me saludó con un beso la primera vez que nos reencontramos, ¡pero igual!, ¿por qué tenían que estar tan estúpidamente pegados!, ¡yo quería tenerla así de cerca!, en mi mente se crearon mil formas de matar a ese chucho de mier…

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